Nuestro METRO - N° 188
El Metro continúa mejorando su oferta de transporte en las líneas A y B gracias a la adquisición de 22 nuevos trenes. En este momento se cuenta con 56 trenes en servicio en la línea A y 6 trenes en servicio en la línea B, lo que ha permitido mejorar la oferta de servicio en un 8%. Esto se traduce en mejores frecuencias y un aumento en la capacidad de transporte. Los usuarios han recibido de manera positiva los cambios.
Desde comienzos del mes de agosto, el Metro reforzó el servicio en la línea A gracias a la llegada y puesta en operación de los nuevos trenes adquiridos recientemente por la empresa.
Es por esto que se pasó de 52 a 56 trenes en la línea A en las horas de mayor afluencia. Con esto es posible disminuir el intervalo de paso de los trenes de esta línea a 3 minutos durante las horas pico. Esto representa un aumento en la capacidad de transporte del 8 por ciento hora/sentido.
A raíz de esta mejora en la frecuencia, ya no se hace necesaria la operación de trenes expresos, más conocidos como los trenes "Naranja" y "Verde" que no se detenían en algunas estaciones en las horas pico. Desde el 1° de agosto, los trenes se detienen en todas las estaciones.
Estas mejoras en el servicio son posibles gracias a la adquisición de 22 nuevos trenes por parte de la Empresa. De estas nuevas unidades, 17 ya se encuentran en la ciudad, de las cuales 9 están en operación. Los demás vehículos se encuentran en protocolos de pruebas de puesta a punto.
Con lo anterior, la Empresa busca aumentar su oferta de transporte con el fin de prestar un mejor servicio a sus usuarios.
Trenes cada tres minutos en hora pico
Dos generaciones de trenes
Los primeros 42 trenes con los que empezó a rodar el Metro en 1995 son de fabricación alemana, producidos por la empresa MAN. Estos son los que conocemos como trenes de primera generación (a la izquierda en la foto).
En 2011 se sumaron a esta flota inicial 13 trenes fabricados por la empresa española CAF (a la derecha en la foto), aumentando la flota a a 55 vehículos. Estos se conocen como trenes de segunda generación, a los que se les añadieron 3 más que llegaron en 2015 y los 22 del pedido que se está recibiendo desde el último trimestre de 2016.
Tanto los CAF como los MAN son trenes de tres vagones. En la Línea A por lo general se unen o acoplan dos de ellos para un total de seis vagones, mientras que en la línea B no es posible realizar este acople. Ambos tienen un ancho de 3,2 metros, una altura de 3,8 m y una altura interior de 2,2 m.
Vale anotar que los trenes MAN, que sobrepasan los 20 años, se encuentran en perfecto estado gracias al riguroso mantenimiento llevado a cabo por el Metro y al cuidado de los usuarios. Estos vehículos tienen una vida útil estimada de 30 años.
Primera Generación
Segunda generación
Mejores indicadores en el servicio
Ya han llegado a Medellín, concretamente a los talleres del Metro, 16 trenes nuevos de un pedido total de 22 hecho a la empresa española CAF. Poco a poco, y después de pasar por una serie de protocolos de prueba, los trenes han empezado a incorporarse a la operación comercial. Como consecuencia de este aumento de vehículos, indicadores como el índice de calidad de tráfico y la calificación del servicio por parte de los usuarios han venido mejorando paulatinamente.
El índice de calidad de tráfico mide el porcentaje de vueltas previstas en la programación diaria de los trenes que efectivamente se realizaron. Una vuelta es el recorrido que un tren realiza prestando servicio comercial desde un punto de origen hasta regresar nuevamente a él, como por ejemplo entre Niquía – La Estrella – Niquía.
En febrero de este año este indicador fue de 93,35%, en marzo fue de 94,87%, en abril fue de 95,48% y en mayo fue de 95,9%, una mejora sostenida que confirma el impacto positivo del aumento de flota.
En cuanto a la calificación del servicio por parte de los usuarios, en el segundo semestre de 2016 la calificación fue de 4 sobre 5, mientras que en el primer semestre de 2017 aumentó a 4,17 sobre 5. Esta medición es realizada por una empresa externa contratada por el Metro.
DIRECCIÓN DE COMUNICACIONES