Nuestro METRO - N° 205
Estos módulos, 16 en total y conocidos como ultracapacitores, fueron instalados en la estación Niquía como fase inicial del proyecto denominado “Sistema de compensación en corriente directa para aprovechamiento de frenado regenerativo basado en ultracapacitores”.
Desde hace varios años, la Empresa viene estudiando cómo recuperar la energía que resulta del frenado de los trenes cuando un tren se detiene en una estación y no hay otra unidad que pueda aprovecharla, ya que se pierde cerca del 40% por ciento de la energía del frenado y esta puede disiparse en forma de calor, calentar las resistencias del vehículo y eventualmente, la catenaria.
Fue así como en conjunto con la Universidad Pontificia Bolivariana (UPB), se analizaron varias alternativas como baterías de plomo ácido, capacitores electrolíticos y los ultracapacitores. Se determinó que estos últimos podían almacenar más energía que los otros sistemas de almacenamiento en menor tiempo, siendo más eficientes.
Los ultracapacitores permiten además proteger la catenaria y alivianar su carga, ya que cuando se producen frenados constantes de los trenes hay unos picos muy altos de voltaje que pueden generar un calentamiento excesivo de la catenaria y eventualmente, afectar la operación.
Los ultracapacitores absorben todos los picos altos y bajos de voltaje, con lo cual se estabiliza el nivel de tensión que recibe la catenaria. Para los picos altos, los ultracapacitores los captura y genera carga mientras que para los picos bajos, suministra la energía para estabilizar el voltaje en la catenaria.
Esto es importante ya que los picos altos, como ya se mencionó, pueden generar un sobrevoltaje y calentamiento mientras que los picos bajos pueden desembocar en una desconexión que afecte el funcionamiento de los trenes.
De esta manera, se brinda una protección extra a la catenaria que es el hilo que se encarga de alimentar de energía a los trenes. A esto se le suma el aprovechamiento de la energía disponible en los frenados y la disminución del impacto ambiental al disipar energía en las resistencias de frenado.
En cuanto al ahorro de energía, se estima que con la energía que se produce a las 2 horas de operación de los ultracapacitores se podría cargar un vehículo eléctrico tipo Twezzy y a las 18 horas de funcionamiento se podría cargar un bus eléctrico.
Vale la pena anotar que la energía resultante del frenado regenerativo de los trenes y que no podía ser aprovechada por otro tren cercano, fue uno de los factores que confluyó para que se presentaran las afectaciones en la catenaria en 2018. En ese sentido, el proyecto de ultracapacitores se constituye en una medida más para minimizar el riesgo de fallas en la catenaria.
En el proyecto de ultracapacitores se invirtieron más de mil millones de pesos, más de 1.300 horas de trabajo del personal Metro y más de 10.000 horas de investigación de parte de la Universidad Pontificia Bolivariana.
Próximamente, la Empresa instalará más ultracapacitores en otras subestaciones de la línea A.
DIRECCIÓN DE COMUNICACIONES