Nuestro METRO - N° 189
El Metro compró 22 trenes en España para reforzar la operación y el servicio. Estas unidades, compuestas por tres vagones o coches cada una, empezaron a llegar a nuestra sede en Bello el 18 de noviembre de 2016 y hoy ya contamos con 18 de ellas. Esperamos terminar este año con dos más y las otras dos llegarán en 2018.
De los 18 nuevos trenes ya están prestando servicio 12. Los demás están en etapa de pruebas y puesta a punto y se incorporarán a la operación gradualmente.
El incremento de la flota nos permitió aumentar la frecuencia – reducir los intervalos – en horas pico y en horas valle, es decir que ahora transcurre menos tiempo en el paso entre dos trenes por una estación o, lo que es lo mismo, pasan más seguido.
De lunes a viernes, en horas pico (de 4:30 a.m. a 8:15 a.m., y de 3:15 p.m. a 7:15 p.m.), en la línea A pasamos de un intervalo promedio entre trenes de 3 minutos con 40 segundos a 3 minutos, mientras que en las horas valle comprendidas entre las 8:15 a.m. y las 3:15 p.m., redujimos el intervalo promedio, de 7 minutos a 5 minutos con 45 segundos. Entretanto, en línea B, bajamos el intervalo promedio en horas pico, de 4’45’’ a 3’50’’, mientras que entre las 8:15 a.m. y las 3:15 p.m., ronda los 7 minutos.
Estos intervalos son planificados, pero pueden variar de acuerdo con condiciones específicas que se presentan en el servicio, como cambios en la demanda de viajeros, incidentes operativos, entre otras.
Hoy la flota de trenes de la Empresa tiene 76 unidades y llegaremos a 80 el próximo año. Con las modificaciones que implementamos en la planificación, gracias al incremento de la flota, mejoró la frecuencia de nuestro servicio. No obstante, para que la mejora continúe, también es fundamental el buen comportamiento de los viajeros, con base en principios y acciones de la Cultura Metro.
Algunos muy importantes: dejar salir primero a los usuarios que llegan y así ingresar más fácil a los diferentes medios de transporte del sistema Metro, activar el botón rojo y la palanca azul de los trenes solo en casos de real emergencia, si el tren que arribó a la estación no tiene espacio disponible, esperar el siguiente; al tratar de entrar por la fuerza se pueden generar empujones, golpes, accidentes o dificultades para el cierre de puertas y, con ello, demora para la salida del tren, retraso en el servicio de otras unidades y afectación del viaje de miles de personas que estén usando el sistema.
DIRECCIÓN DE COMUNICACIONES
